BENEFICIOS DE GRITAR
Gritar es el acto de levantar el volumen de la voz y puede asociarse al sentimiento de enojo o ira, esta expresión modifica la voz haciendo que se escucha diferente a la habitual.
Al gritar podemos vociferar, chillar, vocear, desgañitarse o bramar, sin embargo una persona puede gritar por muchos motivos como por ejemplo: estar en un lugar muy ruidoso, estar alejada a una distancia de la persona que habla o incluso padecer de un trastorno auditivo.
El origen de gritar en latín procede del verbo quiritare que significa llamar en auxilio, esta reacción genera molestias, aturde y produce que las personas alrededor se cubran con las manos para taparse del ruido, sin embargo estos son los beneficios de gritar que seguro no conoces y son provechos para la salud física y mental.
Expulsa las tensiones acumuladas
Mejora el equilibrio mental
Actúa como sedante natural
Libera endorfinas y adrenalina
Al gritar nuestro cerebro libera endorfinas haciendo circular adrenalina por todo nuestro cuerpo descargando la negatividad y a su vez produciendo placer.
Ayuda contra la depresión
Expertos señalan que no gritar conlleva a padecer depresión o enfermedades mentales, desencadenadas por contenerse las emociones, gritar nos ayuda a liberar esos sentimientos negativos como la ira, la rabia y la depresión, usando como herramienta terapéutica gritar a solas en nuestro hogar.
Incrementa la fuerza muscular
La ciencia dice, según una perspectiva científica, que gritar te hace más fuerte, al parecer gritar o gruñir resulta una estrategia efectiva para aumentar la fuerza y ser más productivos, aumentando la potencia de las señales eléctricas que nuestro cerebro envía a los músculos.
Aumenta la tolerancia al dolor
Para algunos deportistas gritar puede incrementar la tolerancia hacia el dolor, ya que ayuda a activar nuestro mecanismos opiáceos endógenos y hace aguantar por más tiempo situaciones dolorosas.
Puede salvar nuestra vida
Gritar nos ayuda a expresar diferentes emociones en nuestro organismo, nos libera de energía negativa para canalizar nuestro estado de ánimo, calma nuestra ansiedad, pero también gritar llama la atención cuando pasamos por situaciones como el peligro o conflictos sociales.
Generar un grito en un momento determinado nos puede salvar la vida alertando que estamos en grave peligro. De hecho muchas películas de terror o suspenso han recreado situaciones en donde gritar se convierte en una prioridad.
Ejercita nuestros músculos faciales
Gritar nos ayuda a ejercitar los músculos de la cara, porque realizamos movimientos de esa parte del rostro que generalmente no movemos con mucha frecuencia, algunas personas gritan gesticulando ya sea de enojo o frustración, aún así se trabaja la mandíbula las mejillas los ojos y la frente generando elasticidad.
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